viernes, 11 de febrero de 2011

Quiero ser congresista

Muchas veces veo con repulsión la labor de nuestros padres de la patria. Siento pena al ver que tras su afán de llegar al Congreso, no está la vocación por servir a su país, sino la inquietud de sacarle provecho descarado a su cargo.
Este congreso que ya se va, nos deja "mataperros", "comepollos", "planchacamisa", "lavapies", "robaluz", etc. Y ahora, a puertas de tener otra camada de congresistas que, sin dudas, dará que hablar (sólo siendo candidatos lo hacen), entristezco nuevamente.
Alguien tiene que poner las cosas en orden. Alguien tiene que hacerles saber que el congresista no es un sinvergüenza que aprovecha su posición para hacer gestiones asquerosas, evadir a la justicia  (inmunidad parlamentaria), robar plata de los viáticos, practicar el nepotismo, hacer contrataciones fantasmas... No terminaría si enumero los delitos que comenten en sus gestiones.
Después de tanta decepción, ronda por mi cabeza la loca idea de querer ser congresista. No para poder hacer lo antes descrito, sino porque tengo el ideal de cambiar tanta podredumbre dentro de esa institución gubernamental. Quiero ser congresista y enseñarles a todos esos zánganos quienes viven de nosotros, que con el Perú no se juega.
Es indignante ver que hayan personas quienes tengan planificada toda la vida teniendo al congreso congreso como un trabajo seguro. Es poco o nada lo que hacen y sinceramente, por más cultos que puedan ser algunos, la mamadera se les tiene que quitar. No debe haber reelección parlamentaria inmediata. Debemos desparasitar el Congreso de la República.
Los candidatos al parlamento no deben ser elegidos a dedo. Deben ser militantes del partido y pasar por elecciones internas. Pueden incluir invitados, pero todo esto debe tener un filtro. No puede entrar cualquier hijo de vecino a ocupar un sitio tan importante. No es dable que personas como "Pepe Vásquez", "Brad Pizza", Evelyn Ortiz, July Pinedo, etc. tengan el apoyo de las masas para entrar facilito sólo a llenar sus bolsillos.
La inmunidad parlamentaria sí debe existir, pero no se debe abusar de ella. Debe ser una obligación usarla sólo contra temas de urgencia que puedan atentar contra el buen desempeño de un congresista. No pueden agarrarse de ello para corromper hasta lo incorruptible y no les pase nada gracias a ese escudo.
En congresista debe ser una persona honesta. No debe tener denuncias de ningún tipo y, en caso las tenga, debe siempre mostrarse solícito a la justicia. No debe evadir juicios amparándose en su inmunidad parlamentaria. Si es culpable de algo, no merece ser parte del parlamento.
Los sueldos son excesivos. El sueldo para un congresista no debería ser mayor a los 2 mil quinientos nuevos soles más beneficios. No es admisible que una persona gane más de 14 mil soles sólo por calentar el asiento y robar a su antojo. Es indignante porque existen muchos profesionales de gran nivel que son sub empleados.
Si alguna vez llego a ser congresista, donaría todo mi sueldo a albergues que lo necesiten y sólo me quedaría con esos 2 mil quinientos soles, no más. No sería parte de esa tira de Zánganos que no valen mucho y aparte del sueldote que ganan quieren más y más. Quiero ser congresista por ese y más motivos. No soporto más tanta sirvergüenzura.
Quisiera hablar más cosas, como la preparación que deben tener nuestros padres de la Patria, pero lo dejaré para otro post, porque este tema es inacabable. Sólo espero que cuando vayamos a votar elijamos a alguien que por lo menos creamos ama a su patria o hagan como yo, vicien su voto.